Aquí estamos... en Madrid!

Bueno, estoy en barajas, sentada en el suelo con el culo helado y apoyada en una columna. Pablo mientras hace cola para embarcar las maletas, una cola interminable que parece no acabar nunca. El viaje en ave un poco surrealista. Claro que yo no podía parar de llorar después de haberme despedido de mis padres y claro, el señor del asiento de al lado me miraba como diciendo: que hace esta mujer más grande que un trinquete, con el marido al lado y llorando como una magdalena.

Pues eso es lo que hay señor, que soy de corazón pequeño y lagrima fácil así que a llorar todo lo que quiera y mas hasta que me quede sin lagrimas. Ahora ya más tranquila y sobre todo muerrrrta de hambre. Frio hemos pasado de morir porque Madrid esta enterito lleno de nieve, hasta las trancas y claro, bajarnos vestidos de verano del ave hasta entrar en atocha, un frio de muerte. Ahora aquí hay retrasos, con la que ha montado la nieve los trabajadores no han llegado al aeropuerto porque están en atascos la M40 cortada, no funciona el transporte público.. y los aviones no pueden salir así que a ver cuánto tiempo nos espera aquí. Pienso esperar comiéndome un BigMac gigante porque muero de hambre. Espero que la señora Ana María nos espere en su casita hasta la hora que lleguemos, porque si no me veo durmiendo en el malecón.

En fin que lo dicho. Que no nos hemos despedido de toda la gente que nos gustaría porque hemos pasado dos días bastante estresados y algo tristes y hemos preferido irnos un poco por la puerta de atrás. Pero os mandamos un beso enorme a todos.

Bueno la conexión desde la cola la hago con un conector wifi que me ha dejado un cubano que está delante nuestra. El hombre es muy amable pero nos ha pedido si nos importaba pasarle una maleta porque él llevaba muchas y le iban a cobrar un gran recargo. Pablo, como es almejita y no tiene maldad le dijo que sí, pero como yo tengo la picaresca de una mala víbora pues le he dicho que ni loca le paso yo la maleta a nadie que no conozca, pa que lleve drogaina o cualquier otra cosa y me vea yo los próximos 10 años en una cárcel castrista… ni soñando. Así que pablo amablemente le ha dicho que no, que era muy arriesgado y que no lo conocíamos, que preferíamos pagarle el sobrecargo. A lo que el hombre ha respondido: es que los cubanos somos de otra manera. Bueno pues yo soy española y no me juego el tipo por nadie. Así que nada, le hemos devuelto el wifi y ahora escribo sentada en el McDonald mientras pablo pide dos súper menús. Lo que no se es cuándo podremos colgar este post porque por lo visto han quitado las zonas wifi que había en el aeropuerto.

Dos horas más tarde, las 4,30, y aun no han abierto el aeropuerto. Parece que las noticias son algo más positivas y no tendremos que pasar la noche aquí que era lo que temíamos. Sobre las 7 nos han dicho, bueno mientras que sea así no importa, tampoco tenemos prisa jeje. Bueno, vamos a bichear a ver si encontramos alguna wifi sin clave para poder mirar correo y esas cositas. Y para buscar un sitio mas cómodo que este frio suelo que vamos a pillar una pulmonía. Luego sigo escribiendo, a ver si no me duermo en cualquier banco.

Después de patear todo el aeropuerto no hemos encontrado nada, por lo visto han quitado todas las wifis que había así que na de na. Paciencia porque hace falta. Voy a enchufar el ordenata y dejar que se cargue.

Bueno, acabo la pesadilla. Se dan por anulado todos los vuelos y nos traen a todas las personas de la terminal de barajas, es decir, a unas 600 personas, a un pedazo de hotel a esperar que pase la nevada y que podamos irnos, no sabemos si mañana o cuando pero bueno, al menos estamos aquí tranquilos, nos hemos hartado de comer en el buffet y ahora a la habitación que es fantástica. Os pongo una foto del comedor con las 600 personas comiendo. El hotel tiene wifi así que podemos conectarnos. Mañana nos dirán si sale el vuelo o no. Lo malo es que no hemos podido avisar a la Señora Ana María de que no llegamos para dormir a su casa, bueno cuando no nos vea llegar se lo imaginará. Bueno chicos después de este larguiiiiisimo día nos vamos a dar una duchita y a ponernos las bragas del revés porque no nos han devuelto el equipaje que ya estaba facturado.

Besitos a todosssssss

Elena.