Estamos en la zona Tana Toraja. Cómo hemos llegado hasta aquí es toda una odisea porque esta zona está muy alejada, no es muy turística y tiene malas conexiones.
Tana Toraja está en la Isla de Sulawesi, casi en el centro. Para llegar allí primero tienes que volar hasta Makassar, la ciudad más grande de la Isla y que está justo en el extremo sur de la misma. Volamos desde Denpasar, en Bali, y llegamos a las 9,30 de la noche. Nos habíamos reservado un hotel por internet llamado Makassar Golden que costaba 30 euros, porque al llegar tan tarde es complicado ponerse a buscar en una ciudad que no conoces.
Cuando llegamos al aeropuerto y antes de marcharnos de él, preguntamos si había algún vuelo que nos acercara a la zona de Tana Toraja. Nos dijeron que si, que había dos vuelos semanales y que uno de ellos salía a la mañana siguiente a las 9 pero claro, la ventanilla ya estaba cerrada y no podíamos comprar el billete. Las alternativas eran 9 horas de autobús o ese vuelo, había que cogerlo como fuera. Decidimos llamar por la mañana temprano a las 7 al aeropuerto para preguntar si había sitios disponibles y si nos decían que sí, salir corriendo para allá. Cogimos un taxi rumbo al hotel y el taxista nos dice “ummm hotel Golden, good hotel good hotel”. Y cuando llegamos, efectivamente, era un hotel fantástico, con todo el personal uniformado en la recepción y sus grandes espejos. Por 30 euros, con desayuno y justo en el centro de la ciudad, genial. Cuando llegamos a la habitación era muy bonita, pero nada más abrir la puerta nos asaltaron dos lagartijas que andaban a sus panchas por el suelo. Yo, que odio todo tipo de bichos, me puse a gritarle como una loca al botones que tenía que cazar a las dos lagartijas y allí ves al pobre hombre, totalmente uniformado con su chaqueta blanca de cuello mao, su falda y su turbante revolcado por el suelo cazando lagartijas a las 12 de la noche. Sólo consiguió atrapar una, la otra, para mi desgracia, durmió con nosotros toda la noche.
A las 7 de la mañana llamamos al aeropuerto. La persona que nos atendió no hablaba muy bien inglés y no estábamos muy seguros de que nos hubiera entendido, sólo sabía decir que era un avión muy bueno de origen español (vaya garantía). Sin tenerlas todas con nosotros nos levantamos corriendo, cogemos un taxi y nos plantamos en el aeropuerto. En la ventanilla nos dicen que si, que hay asientos, que sólo hay un pasajero más así que somos 3. El vuelo dura 45 minutos y cuesta 14 euros. Lo compramos, el hombre nos pregunta nuestros nombres, los escribe en un papelito y nos dice que vayamos a embarcar el equipaje.
Era todo un poco sospechoso pero no había otra, teníamos que coger el vuelo. La chica de la ventanilla de facturación tenía una perla de cada color en cada diente, algo muy bonito y estético, y además de hacernos pagar 2 euros por el sobrepeso de equipaje (sólo se permitían 10 kilos) nos preguntó de todo sobre nuestras vidas, si estábamos casados, si teníamos hijos, se ve que le picó la curiosidad. Nos dice que no nos asignará asiento porque podemos elegir dónde sentarnos, total, sólo éramos 3 personas en el vuelo.
Ante la duda de si al final volaríamos o no, nos dirigimos a la puerta de embarque a esperar. A la hora indicada se dirigió a nosotros un chico que muy solemnemente nos dijo: por favor, embarquen por la puerta 5. Que no se para qué tanta solemnidad si sólo estábamos los dos. Pues solemnemente nos bajaron por una escalerita hasta la pista y nos dicen que tenemos que ir en un autobús hasta otro aeropuerto. En el autobús ibamos nosotros dos, el tercer pasajero (en breve se convertirá en protagonista de la historia jeje), el piloto, el copiloto y la chica con los dientes de perlas de colores, que fue todo el camino señalándonos y supongo que contándole al piloto toda la información que nos había sacado antes. Para nuestra sorpresa el piloto llevaba una bolsa con 6 paquetitos,esperábamos que nuestras sospechas no se confirmaran. Salimos del aeropuerto por un camino por el campo hasta llegar a nuestro nuevo aeropuerto: literalmente un hangar en el que había 4 aviones de hélice súper pequeños, de los cuales 3 estaban medianamente nuevos y uno terriblemente viejo. Y cual era nuestro avión? Bingo! por 14 euros qué mas podíamos pedir?. Nada más llegar nuestras sospechas se confirmaron: los paquetitos que llevaba el conductor en una bolsita de una panadería eran nuestro desayuno: un bollito, una barrita de chocolate y un vasito de agua para cada uno. El avión sólo contaba con 20 asientos. Nos dieron unos cascos inmensos para evitar el sonido por el camino. Tras unos minutos de preparación el avión empezó a correr por la pista y echó a volar. La experiencia fue muy bonita y una descarga de adrenalina.
El avión volaba muy bajo y todo el tiempo podíamos ver todo: la costa, las islas de arena blanca, las plantaciones de arroz... Pero también se movía muchísimo y por un momento me arrepentí de no haberme tomado mi pastilla contra el mareo.
LAS VISTAS DESDE EL AVION, VEIS LA ISLA CON FORMA DE CORAZON? ES QUE EL CRISTAL ESTABA MUY SUCIO Y NO PUDE CONSEGUIR UNA FOTO MEJOR
Tras 45 minutos volando por encima de vegetación y poblados Toraja el avión aterrizó. No se si puedo llamar exactamente a aquel lugar un aeropuerto, era una explanada sin vegetación y un edificio de madera a medio construir de unos 3x3 metros cuadrados. Al bajarnos del avión nos dieron las maletas directamente, claro, aquí no había cinta donde recogerla. Cuando salimos al exterior no podíamos creerlo: allí no había nada, ni un alma!!!! estábamos en medio de la nada, sólo nosotros 2, el otro pasajero y la tripulación que con las mismas, montaron a 4 personas que estaban allí esperando y se volvieron a marchar rumbo a makassar. En el exterior había una persona con un coche que nos dice: taxi a Rantepao. Le preguntamos cuánto es y nos dice que 10 euros, le decimos que está loco, que es una pasada y que no puede ser. Conseguimos que baje hasta 7 euros pero seguía pareciéndonos una pasada, cuando le decimos que no, el tipo nos dice: y qué vais a hacer? Soy vuestra única opción, aquí no hay nadie mas!! y los dos nos miramos como diciendo: no, pero si el tipo tiene razón. Pero no, no era nuestra única opción, había otra... cual? Exacto! El tercer pasajero! Había una tercera persona en la terminal! A los 2 minutos aparece un coche que viene a recoger a este hombre. Le preguntamos que si nos podemos ir con él y que cuanto nos cobra con carita de pena y, para nuestra sorpresa, nos dice que no nos cobra nada, que nos lleva porque le coge de paso. Si!!!!! menuda chorra, pudimos mirar al colega del taxi y decirle: lo siento eh? Que dice que nos lleva gratis.
Montamos nuestras maletas en el coche y nos fuimos con ellos hasta Rantepao a una hora de camino. Eran dos personas muy amables, hablaron con nosotros por el camino y nos contaron cosas sobre los Toraja y también nos dijeron que al día siguiente había dos funerales, uno en su pueblo y otro en un pueblo cercano. Perfecto! Era la información que necesitábamos oír. Llegamos a Rantepao que es la ciudad más grande de Tana Toraja, y aún así no es más grande que un pequeño pueblo de España. El coche nos dejó en el centro y con las mismas nos buscamos un hotel. No había mucha oferta y en su mayoría era bastante cutre, encontramos el único decente del centro de la ciudad, el Indra Toraja Hotel, por 18 euros desayuno incluido (pongo el nombre del hotel que algunos viajeros nos han pedido que los pongamos). Lo siguiente era conseguir un coche o una moto para ir mañana al funeral. No conseguimos ningún coche, aquí es imposible alquilar ninguno sin conductor, pero encontramos una motito que es perfecta para nosotros. El resto del día lo dedicamos a explorar la ciudad y los alrededores. Y rápidamente, desde el primer momento, quedamos enamorados de los Toraja.
Como ya dije antes Tana Toraja es un área en el centro de la Isla de Sulawesi, en Indonesia. Está habitada por los Torajas, que son un pueblo de lo más amable, encantadores! Y tienen una arquitectura muy especial y unos ritos funerarios impresionantes. Es una zona muy salvaje, me recuerda mucho a Ecuador, con muchísima vegetación, campos de arroz, caminos de tierra, niños que te saludan insistentemente, búfalos de agua metidos en los barrizales... Las casas típicas de los Toraja son muyyyy bonitas y únicas en el mundo. El techo tiene forma de barco, son de madera pintada y tienen la cabeza de un búfalo sobre la puerta principal. Colocan cuernos de búfalo en la fachada. Cuantos más cuernos de búfalo tengan, más honra para la familia. Hay otras estructuras iguales, pero más pequeñitas, que es donde almacenan el arroz. Todas las casas tienen enfrente algún almacén de éstos y las hay que tienen hasta 6 almacenes. Resulta impresionante ver las casas diseminadas por la zona. Con nuestra moto recorrimos muchísimos caminos de tierra buscando villas, pequeñísimos poblados que resulta hasta difícil de localizar porque son grupos de 4 o 6 casas llenos de gallinas con sus pollitos picoteando por todas partes. Andar por ahí es algo único, resulta difícil encontrar algo igual, nos hemos sentido especiales y afortunados por poder estar aquí, hemos vivido algo único que jamás olvidaremos.
Y ESTOS LOS GRANEROS DE ARROZ, IGUAL PERO MAS PEQUEÑITOS Y MÁS ALTOS PARA QUE LOS ANIMALES NO SE LO COMAN
AQUI UNA CARPINTERÍA DONDE SE HACEN CON MADERA LAS CABEZAS DE BUFALO QUE ADORNAN LA ENTRADA DE LAS CASAS
EN ESTE PAÍS YO SOY LA SENSACION Y LIGO UN MONTON, ASI QUE PABLO EL POBRE ESTÁ QUE NO PUEDE YA CON LOS CUERNOS.
UN BÚFALO DE AGUA, ESTO ESTÁ LLENITO DE BÚFALOS POR TODAS PARTES, ES LA COMIDA PRINCIPAL EN TODOS LOS RESTAURANTES Y ESTÁ RICO AUNQUE UN POCO DURO. POR CIERTO QUE PREGUNTE EL NOMBRE DE ESTE BUFALO Y ME DIJERON QUE SE LLAMABA "DON JOSE REINA", NO SE POR QUÉ...)
COMIENDO EN EL UNICO RESTAURANTE QUE ENCONTRAMOS EN TODO EL ÁREA A PIE DE CARRETERA CON UNAS VISTAS MUY BONITAS
EN ESTE VIAJE NOS ESTAMOS HARTANDO DE ZUMOS NATURALES DE FRUTAS. AQUÍ CON DOS DE BANANA Y PAPAYA MIX. CUESTAN COMO 60 CÉNTIMOS DE EURO.
SE QUE NUNCA DEBERÍA PONER UNA FOTO COMO ESTA PERO NO PUEDO RESISTIRLO, ESTO ES UN MASAJE DE CUELLO Y HOMBROS MIENTRAS QUE ME HACE EFECTO EL BAÑO DE CREMA QUE ME HAN PUESTO EN EL PELO MASAJEANDO DURANTE MEDIA HORA, DIOS MIO, QUE NADIE ME NIEGUE QUE ESTO ES EL PARAISO
A la mañana siguiente nos fuimos a buscar el funeral. Los funerales toraja son algo diferente a todo lo conocido y son muy famosos, si algún turista viene a esta zona su gran ilusión es tener la suerte de ver un funeral. Los funerales aquí se hacen meses o años después de que la persona se muera. Cuando alguien muere lo dejan en la casa, le van inyectando formol pero lo dejan en la casa hasta que consigan ahorrar el suficiente dinero para el funeral. Pero pueden tardar meses o años, hasta 10 años en algunos casos, y puede que durante ese tiempo mueran otros miembros de la familia y se esperan también para hacer un funeral conjunto. Una vez que ahorran lo suficiente convocan una fecha para que pueda estar todo el mundo presente, y con todo el mundo se refieren todo el pueblo al completo, incluso la gente que ha emigrado a otra ciudad o a otra isla viene para el funeral. Siempre se hacen en la época seca, julio, agosto y principios de septiembre, por eso hemos tenido tanta suerte. El funeral dura muchos días y son toda una fiesta. La familia ha debido ahorrar para comprar búfalos y cerdos, cuantos más búfalos más grande será el funeral (algo así como las bodas en España pero con los invitados). Y lo más de lo más es tener un búfalo blanco, estos son súper caros y tener uno en el funeral es todo un honor. La familia prepara la explanada de delante de su casa para el funeral. Colocan un montón de plataformas de bambú debajo de las estructuras almacenes de arroz para que la gente se siente allí y allí coman, descansen, charlen... es el área de reunión.
El primer día es el día de la pelea de búfalos. Se bendicen los animales, se trasladan los cuerpos al área de ceremonias y se hace la pelea. Éste fue el día que llegamos nosotros al pueblo. Cuando llegamos, los búfalos estaban en el centro de la explanada y los estaban como bendiciendo con una ceremonia. Todo el pueblo estaba allí, era increíble ver tanta gente.
Ese día trasladan a los muertos al lugar de la ceremonia y los colocan allí, matan un búfalo y comen todos juntos. Sacaron muchas ollas de comida y las pusieron en el centro. Había de todo.
ESTA ES UNA DE LAS ZONAS, CON LOS ALMACENES DE ARROZ Y LAS PLATAFORMAS DE BAMBÚ DEBAJO PARA QUE LA GENTE SE SIENTE
Nosotros estábamos allí, en una esquina mirándolo todo y sin querer molestar tampoco, allí los dos guiris que se veían desde todas partes. De pronto, una vieja muy vieja que estaba sentada en las plataformas de bambú nos hace señas, nos dice adiós con la mano y nos señala el suelo junto a ella para que nos sentemos. Nos acercamos y amablemente nos dice que nos sentemos a comer con ellos. Nosotros les dimos las gracias, nos quitamos los zapatos y nos sentamos allí con ellos. Era una familia completa y una de las nueras de la señora que estaba allí con sus hijas medio chapurreaba inglés, así que nos pusimos a charlar. Llegó el momento de comer y trajeron un montón de cañas de bambú quemadas por fuera, cacerolas llenas de arroz hervido y unos paquetitos hechos con hojas de plátano o algo así que cuando lo abrías tenía una masa de arroz. La señora abre una de las cañas de bambú por un extremo y la vuelca sobre un papel en el suelo. Del interior sale un cerdo troceado, lo meten alli dentro con especias y algunas plantas, lo entierran en el suelo y hacen encima un fuego, así lo cocinan. Además trae como una bandeja en la que hay un pie de búfalo enterito, con su pezuñita y todo, su grasa, su piel, sus pelitos... y el cerdo de la caña de bambú exactamente igual. Por supuesto que todo se come con las manos y en el suelo, todo el mundo metiendo las manos en el arroz para coger un puñado y metérselo en la boca. La señora me acerca el papelón con el cerdo y me dice que coma. A mi, que me muero antes que probar el cerdo con sus pelitos y todo, lo único que se me ocurre decirle, en un ataque desesperado de última hora, es que soy vegetariana y que no como carne, que gracias, que tiene buena pinta pero que no como carne. La señora en ese momento me acerca el arroz y me dice que entonces coma arroz. Pero le digo que no, que en ese momento no tengo hambre pero que mil millones de gracias. Pablo, por supuesto, se puso a comer como loco pezuña de búfalo y cerdo con pelos. Yo estaba que se me revolvían las tripas. Pero claro, el tiempo fue pasando, llegó la hora de comer y mi estómago empezó a rugir. Al cabo de un rato estaba que me comía hasta los pelos del cerdo pero claro, ahora tenía un problema, le había dicho a la señora que era vegetariana, así que no tenía excusa para comer. Con mucho disimulo la llamo y le digo: “yo nunca como carne pero tiene tan buena pinta que lo voy a probar por una vez”. Y allí que estaba yo, en un poblado toraja, sentada en el suelo sobre una estera de bambú comiendo cerdo con pelos y pata de búfalo como si fuera un tesoro. En fin, así es la vida y cuando el hambre aprieta... Pasamos allí un buen rato con la familia. La señora mayor era la tía de los muertos, porque en este caso eran dos muertos, un hombre que había muerto hacía 2 años y su hermana que había muerto 12 meses atrás. Después del almuerzo nos fuimos a dar una vuelta por los alrededores y volvimos para ver la pelea.
NOS SENTAMOS CON LA FAMILIA QUE NOS INVITÓ, AL FONDO SE VE LA EXPLANADA Y LOS GRANDES ALTAVOCES QUE PUSIERON Y QUE TODO EL RATO RETRANSMITIAN REZOS
TRAJERON LOS DOS ATAUDES Y LOS COLOCARON DEBAJO DE LOS ALMACENES DE ARROZ, AMBOS CON SU FOTITO DEL MUERTO.
Por la tarde se lleva a cabo la pelea. En una gran explanada se coloca todo el pueblo en círculo y dentro se lleva a cabo el espectáculo. En primer lugar hay una pelea de personas. Es una pelea a patadas, no pueden tocarse con las manos y todo el pueblo grita y anima a unos y otros. Era todo un poco caótico, no había orden y había momentos en los que parecía que todo el mundo se pegaba con todo el mundo y no sabías nunca si te iba a caer alguna patada. A continuación venía la pelea de búfalos. Eran los búfalos que habían bendecido por la mañana. Tampoco había mucho orden, ni llegamos a enterarnos de cuál ganaba o perdía, la gente corría de un lado para otro cuando los búfalos venían a toda velocidad con sus cuernos de 50 cm. Al final decidimos verlo desde fuera de la explanada porque a veces el animal venía corriendo y daba muchísimo miedo y te tenías que poner a correr. Y allí acabamos el día, hasta que nos volvimos al hotel antes de que se nos hiciera de noche por esos caminos. Fue un día genial, para no olvidar nunca. (VER VIDEO DE LA PELEA)
El siguiente día volvimos al funeral. Ese es el primer día del funeral propiamente dicho. Ese día se colocan los ataúdes en una plataforma en alto, se hacen unos rezos y se mata otro búfalo además de muchos cerdos. Nos habían dicho que empezaría sobre las 9 así que nosotros estábamos allí a las 10, jeje, es que siempre nos cuesta levantarnos. Cuando llegamos no había aún mucha gente allí así que decidimos bichear un poco el área de las cocinas. A la explanada no dejaban de llegar grupos de personas con cerdos atados que tumbaban allí en el centro listos para matar. De vez en cuando venían unos hombres, le clavaban un cuchillo en el corazón y se lo llevaban rápidamente para una zona que supusimos que era el área de cocinas. El sonido de gritos de cerdo era ensordecedor todo el rato. Preguntamos si podíamos ver cómo los cocinaban, algo complicado porque allí nos costó encontrar a alguien que hablara inglés, pero como todo el mundo es muy amable nos dijeron que si. Nos llevaron a las cocinas donde había muchísimas mujeres cocinando, unas hervían el arroz, otras cortaban las verduras que van dentro de los bambúes con los cerdos, otras preparan el te y el café para los invitados... mucho ajetreo. Amablemente nos ofrecieron un tapeo (plátano frito y como unas galletitas) y un vaso de agua. Todas nos miraban, nos sonreían, nos ofrecían de todo y nos decían HELLO!. Les hicimos muchas fotos que a ellas les encantaban. La cocina no era más que un techo de bambú y sobre el suelo de tierra, con barreños de agua, sin agua corriente, todo muy poco higiénico la verdad. En la parte exterior estaban los hombres con la gran fogata y quemando por fuera a los cerdos que iban matando para quitarles los pelos (bueno bueno, que yo vi tela de pelos en lo que nos pusieron luego en el plato). Fue una bonita experiencia ver toda la infraestructura que hay detrás de un funeral porque dar de comer a tanta gente tiene su intringulis.
TRAYENDO A LOS CERDOS, SI LO VEIS BIEN TODO ES CON CAÑAS DE BAMBU, NO HAY CUERDAS NI NADA, SOLO CAÑAS DE BAMBÚ Y OTRAS CORTADAS MÁS FINAS COMO CUERDAS
Luego nos sentamos tranquilamente a esperar a que pasara algo porque claro, ellos estaban todos allí reunidos con sus familiares y charlando pero nosotros estábamos esperando que pasara algo importante.
AQUÍ SE VEN ALGUNOS DE LOS CERDOS QUE IBAN TRAYENDO Y YO SEÑALANDOME LA BOCA EN SEÑAL DE QUE NOS LOS IBAMOS A PIMPLAR A TODOS
ESTE SEÑOR NOS INVITÓ A SENTARNOS DELANTE DE LA TUMBA DEL CABALLERO, TODO UN HONOR, ASÍ QUE NOS HICIMOS UNA FOTO. EL NUMERO QUE HAY ARRIBA INDICA EL NUMERO DE LA PLATAFORMA PARA QUE LA GENTE SEPA DONDE SE TIENE QUE SENTAR, COMO LAS MESAS EN LAS BODAS.
AQUÍ SE VE MEJOR LA ZONA, UNA OLLA EN EL CENTRO HACIENDO A UN CERDO SIMPLEMENTE HERVIDO Y CON SAL Y AL FONDO, CON UNA GRAN ESCALERA DE BAMBÚ, EL TEMPLITO EN EL QUE IBAN A COLOCAR LOS ATAÚDES HASTA EL ÚLTIMO DÍA DEL FUNERAL QUE SE LO LLEVAN A ENTERRARLO
Entonces empezó el movimiento. De pronto todos los hombres salieron al centro y se colocaron en círculo con las manitas dadas. Comenzaron a hacer una especia de danza algo sosa y a rezar con unos cánticos. Esto lo hemos grabado y podéis verlo (VER VIDEO)
Cuando acabaron los rezos vino el momento importante. Todos los hombres se fueron a por el ataúd del hombre, lo cogieron en hombros y lo llevaron hasta el centro donde lo dejaron en el suelo. Luego fueron a por el ataúd de la mujer y también lo colocaron en el suelo. Luego se pusieron todos los más allegados en círculo y comenzaron a cantar rezos mientras que las hijas de la fallecida lloraban agarradas a la tumba, un momento un poco trágico. Esto también podéis verlo (VER VIDEO).
LAS DOS TUMBAS EN EL SUELO, LA GENTE EN CIRCULO REZANDO ALREDEDOR Y LOS HIJOS LLORANDO SOBRE LAS TUMBAS
Y cuando terminaron de rezar cogieron los ataúdes y los subieron al lugar en el que van a pasar los próximos días. Esto también lo podéis ver en video (VER VIDEO). Resultó impresionante, era algo tan extraño, como el muerto no era reciente no había apenas lágrimas, todo el mundo parecía feliz. Fue una sensación única estar allí. Éramos los únicos que no pertenecíamos al poblado, bueno nosotros dos y un periodista o yo que se que andaba solo con una cámara con un zoom de un metro de largo haciendo fotos artísticas. Fue una suerte poder estar allí la verdad, ni hubiéramos soñado con tener tanta suerte y poder verlo tan de cerca.
LOS ATAÚDES YA SOBRE LA PLATAFORMA. LOS HOMBRES SE DISPONEN A QUITAR LA ESCALERA. A LA IZQUIERDA SE VE UNA GALLINA QUE HABÍAN COLOCADO SOBRE UNA VARA DE BAMBÚ NO SABEMOS PARA QUÉ.
ESTAS SEÑORAS ME PIDIERON QUE SI PODÍAN HACERSE UNA FOTO CONMIGO. AL FONDO SE VEN LAS CORONAS DE FLORES
Los dos siguientes días del funeral no pudimos asistir porque teníamos unas diarreas de la muerte y nos quedamos en el hotel a buen recaudo y cerca de un baño limpio para posibles emergencias.Eso nos pasa por comer pezuña de búfalo en un funeral, es lo que tiene...
Pero el último día del funeral volvimos al lugar justo en el momento preciso. Los dos ataúdes los habían bajado de la plataforma y los habían colocado en el suelo para montarlos sobre las estructuras de nuevo y llevarlos hasta su lugar definitivo. Todo el proceso que vivimos aquel día fue de lo más extraño. Las mujeres estaban agarradas a los ataúdes llorando pero aquello no dejaba de ser una gran fiesta en la que todo el mundo se lo pasaba bien.
BAJAR LOS TECHOS DE LAS ESTRUCTURAS EN LOS QUE LOS TRANSPORTAN FUE UNA ODISEA, TODO CON VARAS DE BAMBÚ
Una vez que todo estuvo preparado salió la comitiva y con ella nosotros. En primer lugar iban todos los niños llevando las coronas de flores de papel. A continuación iban dos hombres con una vara de bambú de la que colgaba un “Gong” al que le iban dando sin parar, como las campanas de las iglesias cuando hay un entierro. Luego iban varios hombres que habían colocado en lo alto de varas de bambú muy altas unos paraguas negros y cada uno llevaba una, se veía muy bonito a pesar de que no dejaba de resultar cutre.
Lo siguiente en la comitiva eran los dos ataúdes dentro de las estructuras. Los habían cogido con dos barras muy largas de bambú y los llevaban entre todos los chavales del pueblo. Y por último iba el grueso, los dolientes con las fotos y la llantina y el resto del pueblo.
EL camino fue muy largo y bajo un sol de justicia. Íbamos por caminos de tierra rodeados de palmeras y arrozales. Por el camino, la gente que llevaba los ataúdes no paraban de divertirse: los de un lado empujaban en la dirección contraria y viceversa para ver si se salían a uno de los lados del camino y luego igual pero hacia delante y hacia detrás, de modo que los ataúdes parecían la Virgen del Rocio, casi que se caían todo el rato, de pronto se salían hacia un lado del camino, sobre el arrozal!!! lo soltaban allí medio caído y se ponían a hacer peleas de patadas muertos de la risa con el resto del pueblo jaleando. Otras veces se ponían a mecerlos hacia arriba y hacia abajo y otras a rezar. Resultaba muy extraño y a veces se ponían hasta demasiado brutos y si te cogía cerca te caía alguna patada o algún codazo. Pero resultaba impresionante ver a la comitiva por el camino, era espeluznante. (VIDEO DE LA COMITIVA) (VIDEO DE LA COMITIVA 2).
De pronto llegamos a otro pueblo y en otra plaza de esas entre casas típicas volvieron a bajar a los muertos. Entonces aparecieron hombres con cajas llenas de vasos de agua envasados, yo vi el cielo abierto porque la sed me estaba matando a esas alturas pero, cómo no sería mi sorpresa, cuando de pronto todo el mundo coge los vasos de agua y estalla una guerra de agua entre todo el mundo!! unos abrían los vasos y tiraban el agua a los demás y otros tiraban los vasos enteros, de allí salimos chorreando absolutamente todos. Luego se volvieron a colocar en círculo al rededor de los ataúdes y de nuevo a cantar sus rezos.
Cuando acabaron, la comitiva siguió su camino. Pero de pronto empezaron a subir monte arriba, en serio, por un camino incluso imposible para mi que no llevaba nada, lleno de naturaleza salvaje por todas partes, yo realmente pensé que allí sería donde definitivamente me comiera una serpiente. Y yo que me había ido con los zapatos abiertos, vaya fallo. Bueno pues después de un rato monte arriba y con la lengua arrastrando llegamos a una gran piedra en la que a dos metros de altura había un cuadrado de 75x75 cm con una puerta de madera. Nos preguntamos si sería allí donde iban a meter los ataúdes pero claro, tuvimos que esperar porque los ataúdes tardaron en llegar mucho más tiempo, era imposible subir por allí con algo tan pesado, llegaron muertos.
UNO DE LOS ATAÚDES LLEGANDO (LE HABÍAN QUITADO EL TECHO A LA ESTRUCTURA PORQUE PESABA MUCHO Y LOS SUBIERON POR SEPARADO)
Allí estábamos todos, metidos entre la vegetación como podíamos mirando la piedra cuando llegaron los féretros. Y de nuevo, increíble pero cierto, se desató una gerra de vasos de agua y de empujones entre todo el mundo. Y todo el mundo se reía, así que parece que esa es una forma de pasarlo bien. Entonces un hombre se subió (descalzo como todos) por unas cañas de bambú hasta la puerta de la roca, la abrió (con la correspondiente carita de vaya peste que sale de aquí dentro) y, para mi sorpresa, se metió dentro por el agujero. Lo único que se podía ver desde fuera es que dentro había, al menos, otro ataúd antiguo. Detrás de esa persona se metió otra y lo que sucedió a continuación nos dejó a los dos con la boca abierta. Resulta que ese era algo así como el panteón de la familia, y que muchos de los presentes tenían familiares allí enterrados... pues de pronto los dos hombres que habían entrado asomaron la cabeza por el agujero, muertos de risa, colocándose delante de la cara unas calaveras que habían cogido del interior!!! es que yo no daba crédito!!! y todo el mundo muerto de risa y haciéndoles fotos!! pero que los habían cogido del interior de la tumba!!! era algo repulsivo!!! Pues así, muertos de risa, cogieron los ataúdes y los metieron en el agujero.
MOMENTO SURREALISTA: EL COLEGA SE ASOMA CON LAS DOS CALAVERAS Y SE PONE A HACER EL TONTO MIENTRAS TODO EL PUEBLO SE MEA
Y mientras que ese momento terrible acontecía, una mujer lanzaba caramelos al aire cual rey mago, y un hombre lanzaba paquetes de tabaco, con el consiguiente revuelo que se armó, todo el mundo riendo y empujándose a ver quién cogía más cosas. Por su puesto a los muertos ni caso. Una vez los ataúdes en el interior, que costó porque subirlos hasta la abertura y meterlos costó más que un parto, salieron los hombres de dentro, volvieron a poner la puerta de madera, colocaron las fotos de los difuntos delante, con todas las coronas de flores y varias ofrendas de botellas de agua, tabaco, un gorro y un cojín, y cada mochuelo a su olivo. La gente se fue por el camino que había venido hasta que sólo quedó una señora sola, que lloraba en silencio y que, cuando todos nos fuimos, lloró y rezó delante de la tumba. La única doliente real, pensé yo. Sea como fuere sólo podías pensar que ojalá el día de tu entierro fuera tanta gente y fuera tan divertido como ese. Los Toraja, menudo pueblo, qué peculiares.
ASI QUEDÓ LA TUMBA UNA VEZ QUE TODO HUBO TERMINADO, YA CASI QUE LE HABÍAMOS COGIDO CARIÑO A LOS ABUELOS, ÉRAMOS PARTE DEL FUNERAL DESPUÉS DE UNA SEMANA DE CONVIVENCIA
Pero ese ritual funerario no es lo único alucinante en ese área, en lo que a muertos se refiere. A los muertos los entierran de múltiples formas y algunas de ellas son espeluznantes. Existen tumbas en las rocas, es decir, en una roca hacen un agujero y allí meten el ataúd y luego lo tapan con una puerta de madera pintada.
NOS METIMOS POR UN CAMINO UN POCO APARTADO Y MIRA LO QUE NOS ENCONTRAMOS, ES INCREIBLE DE VERDAD, YO NO PODÍA CREERLO
Los bebés algunas veces los entierran en los árboles, hacen un agujero en el tronco del árbol y allí meten al bebé porque piensan que el árbol lo elevará hasta el cielo.
Otras veces los entierran en estructuras típicas toraja, o ponen monolitos en el suelo. En todos los casos resultan impresionante.
Pero para nosotros, lo más fuerte, ha sido ver las tumbas con los Tau Tau. Los Tau Tau son muñecos a tamaño natural que hacen cuando una persona se muere, le colocan sus ropas, sus gafas, su gorro, su bastón, todas sus cosas, y lo colocan en una especie de terrazas cavadas en la roca. Resulta increíble, impresionante. En uno de los lugares de Tau Tau encontramos que había una cueva en la roca llena de ataúdes, de calaveras, de huesos, por todas partes!!! y no eran antiguos, los había muy antiguos pero también de hace un mes. Las tumbas más antiguas estaban colgadas de la roca, de unas estructuras de madera. Pero estaban tan viejas y tan gastadas que en muchos casos los ataúdes estaban rajados y con agujeros y podías ver perfectamente el esqueleto!!! increíble de verdad, no puedo explicarlo, mejor os pongo las fotos y si podéis, ampliadlas y miradlas con detalle, es impresionante verlo todo, no podíamos ni creernos que estábamos viendo eso, creo que es de esas cosas puntuales en el mundo que uno tiene que ver y que siempre sorprende. (VER VIDEO)
ESTAS TUMBAS ESTÁN EN LA ALDEA DE LONDA, HAY TODO TIPO DE TUMBAS AQUÍ Y LOS TAU-TAU AL FONDO COMO ASOMADOS A UNA TERRAZA
LAS TUMBAS COLGANTES, ESTAS SON LAS MAS ANTIGUAS, MIRAD QUE ALGUNAS ESTÁN ROTAS Y LOS HUESOS ASOMAN POR DEBAJO
LA ENTRADA AL INTERIOR DE LA CUEVA, ERA MUY PEQUEÑA Y CONTRATAMOS A UN GUIA CON UNA LAMPARA DE ACEITE QUE NOS LA ENSEÑÓ, HABÍA UNAS ARAÑAS COMO MI MANO, QUE ASCO
TUVIMOS QUE PASAR POR ZONAS ASI DE PEQUEÑAS CASI ARRASTRANDONOS, Y YO MIRANDO PARA TODAS PARTES NO ME FUERA A ROZAR UNA ARAÑA
MONTONES DE TUMBAS APILADAS, LA ROJA DE LA DERECHA ESTABA RECIEN PUESTA Y EN EL SUELO ESTAN LAS OFRENDAS DE LA FAMILIA: AGUA, CAFÉ, TABACO, COMIDA...
AQUÍ PABLO CON UNOS AMIGOS, TODAS LAS TUMBAS TIENEN UNA TELITA POR ENCIMA NO SE POR QUE Y ESTÁ TODO LLENO DE CALAVERAS.
PA QUE LUEGO DIGAN QUE MI PABLO ESTÁ DELGADO, MIRA COMO SE HA QUEDADO EL GUÍA EL POBRECITO, ESTE SI QUE YA NO TIENE ARREGLO.
También con nuestra motito fuimos hasta unas piscinas naturales donde la gente local se estaba dando un baño. Nosotros no pudimos no porque no llevábamos bañador, sino porque con nuestros cuerpazos íbamos a dar el espectáculo.
Otro punto importante de Tau Tau es Lemo. Allí se encuentran las figuras más antiguas junto con tumbas en las rocas. Esta es la más famosa, la que sale siempre en los documentales pero a mi la verdad es que me gustó más la otra.
El último día fuimos a Kete Kesu, otro sitio para visitar. Allí se encuentran cientos de tumbas colgantes muy antiguas y huesos por todas partes. Hay calaveras por todas partes, huesos amontonados, tumbas medio rotas, vas por el camino y pisas sin querer una vértebra! No tengo palabras. Y luego también hay tumbas más recientes de ladrillo, madera o piedra y tau tau. Pero aquí se encuentran dentro de la piedra y cerradas con una cancela como si se fueran a escapar en algún momento. Daban más miedo aún si cabe verlas ahí detrás. Y también hay una cueva aquí, llena de ataúdes, de huesos, de ofrendas y de humedad. Resulta terrorífico de verdad.
Y tras esta experiencia tan fuerte dejamos Tana Toraja para volver a Makasar, la principal ciudad del sur de la isla. Nos ha encantado nuestra visita a este área y hemos tenido tanta suerte que no podíamos sentirnos más afortunados. Estar aquí ha sido un punto fuerte de todo el viaje, una de las cosas más fuertes que hemos visto en todo nuestro recorrido. Los Toraja son gente encantadora y este área es tan segura que podías irte y dejar la moto con los cascos apoyados encima del sillín y nadie los tocaba. Es increíble, recomendamos a todo el mundo que visite Indonesia que no deje de venir a la isla de Sulawesi.
Y volvimos a Makasar en el mismo vuelo en el que llegamos: nuestro avión de hélice de 20 pasajeros. En este caso llegamos al miniaeropuerto con la incertidumbre de si saldría el avión pero nos encontramos con que había 15 pasajeros más y una ambulancia. Nos montaron a todos en el avión y luego desatornillaron 4 asientos, tiraron una colchoneta en el suelo y metieron a un viejecito moribundo con la botella de oxígeno y todo y a su nieta que lo acompañaba embarazada y que no paraba de vomitar. En fin, menos mal que llegamos sanos y salvos.
Y aquí estamos, en Makasar, esperando que el lunes salga nuestro vuelo que nos sacará del país porque se nos acaba el visado y tenemos que salir. Parece mentira que hayamos pasado aquí un mes completo, hemos visto muchas cosas y aún así tenemos la impresión de no haber visto nada, de haber dejado cientos de cosas por hacer aquí, sin duda tenemos que volver.
Escribo este mail mientras en España se celebra una boda muy especial para nosotros: la boda de mi prima hermana Myriam con el primo hermano de Pablo, Antonio. Eso quiere decir que 3 de las cosas que más echamos de menos en este momento están reunidas justo en este instante: la familia de Pablo, mi familia y la comida, mucha comida española, todo dentro de un mismo salón, cierro los ojos y creo tener alucinaciones de imaginarlo. Y mucha diversión. Si es que es para estar melancólicos hoy, no hemos parado ni un segundo de acordarnos de la boda. Desde aquí les deseamos que sean muy felices.
También queremos hacer una mención a todos aquellos anónimos que nos siguen fielmente, algunos incluso desde el principio. Para nosotros es simplemente un honor que alguien nos dedique un rato de su tiempo, nos sentimos halagados y queremos darles las gracias. Y a los que queremos, por supuesto, y que nunca olvidamos. Y ya está que esto parece un anuncio de cocacola (para los altos, para los bajos, para los que queremos, para los que no queremos...). Un besito a todos y hasta la próxima.
Vaya post que os hemos dado con tanto muerto y tanta tumba, que alegría hijo.
Hola a los dos,
ResponderEliminarme llamo David y hace solo unos días un amigo me recomendó vuestro blog, me ha gustado mucho tengo que decir.
Yo soy de Vigo (aunque vivo en Barcelona).
Me pongo en contacto con vosotros porque en la actualidad estoy, junto con mi socio Adrián, trabajando en un proyecto empresarial en el que creemos os podría interesar colaborar.
Me encantaría poder daros más detalles sobre este proyecto. Podeis contestar a esta dirección de correo: dpemartin@hotmail.com o llamar al número 669258024
Cordialmente,
David
prueba
ResponderEliminarSoy el bufa, haciendo pruebas con el hermano Juan. Ya parece que el Yoigo funciona !!!!
ResponderEliminarUn post muy original pero un poco macabro,creo que ya no vereis mas esqueletos nunca, pero mas miedo daban los tau tau, parece que estaban en una terraza viendo la S.S.
ResponderEliminarNo se como teneis valor de montaros en esos aviones, que sabe Dios lo que puede pasar, no quiero ni pensarlo.
Lo que mas me gusta de las islas es el verde y la vegetacion, muy bonita.
No me extraña que os diera diarrea, ahi no hay ni higiene, ni algo parecido, que asco, con perdon, ahora no se si en un momento dao y teniendo hambre, pos lo comprendo, la proxima escursion desconocida, llevaos vuestros bocadillos.
Bueno que tengais un buen vieje, a vuestro proximo destino, y espero noticias vuestras.
Muchos besitos.
Me encanta leeros, la única pega que os puedo poner es que se me hace muy largo entre post y post (imagino que cosas de las infraestructuras de esos mundos de Dios).
ResponderEliminarQue envidia sana me dais.
Vaya pasada de post. No sólo por lo larguísimo que es, la de fotos y vídeos que tiene, sino también por el contenido. Es totalmente surrealista. Lo del cachondeo que arma la gente en el funeral es difícil de entender. Me hubiese gustado ver un vídeo del tío que se asomó desde la tumba con las calaveras haciendo el gamba.
ResponderEliminarSi el post anterior me recordó al Monkey Island y al Tomb Raider, este me ha recordado a Indiana Jones, por lo de las cuevas con las calaveras, y a los muñecos de Gomaespuma una de las fotos de los Tau Tau :D
Me hubiese gustado también haber visto la pelea de Don Josés (me partí cuando leí lo del nombre del búfalo :).
Me han gustado mucho las ataúdes y los techos de las casas, y las dotes de reportera de Andalucía Directo de Elena :P
¡Besos!
Elena aunque todos sabemos que las dotes que tienes para escribir y reportar son de tu padre, Yo estoi muy orgulloso de como lo haces. No te perdono que no me traigas una calavera pa mi cuarto y un par de peroneles. Y..otra cosa...
ResponderEliminarMe sorprende del funeral que nunca sacas en el video la tómbola, sin embargo al tio se le oye muy cerca. ¿Qué le quitaba encanto?¿No?
Las señoras de lafoto con Elena delante de las coronas ¿No son las camareras de Mª Auxiliadora? Seguro que eran torajas?
FELICIDADES por este post. Digno de National Geografic
hola, que bueno es
ResponderEliminarGracias por compartir vuestras experiencias ! Me encanta leerlas !
ResponderEliminarBerta
Hola viajeros. Os sigo desde hace dos días pero lo que veo y leo está produciendo en mi un efecto muy muy adverso.. ¡se me está poniendo la piel verde, !de pura envidia! y nada de envidia sana sino de cochina envidia, por todo lo que estais viendo y disfrutando...¡ ja ja ja. Ahora en serio, mi mayor enhorabuena y felicidades. Sois geniales. T hay que ver que forma de contar las cosas más guay; me encanta, me recreo en los mínimos detalles. Gracias. Os estaré siguiendo cada dia.
ResponderEliminarUn enorme saludo desde Salamanca.
Simplemente...impresionante!
ResponderEliminarUn besote
Laura y Jagoba
Pareceis de National geografic, estupenda fotografía y reportaje, es precioso, besos
ResponderEliminarUn reportaje impresionante...
ResponderEliminarme ha encantado "viajar" con vosotros!
Impresionante! Gracias por compartir con el resto vuestras experiencias. Continuad así, que de esta forma podemos viajar con vosotros desde nuestras casas!
ResponderEliminarFeliz viaje.
Acabo de descubrir este blog y me he enganchado inmediatamente.
ResponderEliminarMuy completo el reportaje y bien documentado gráficamente.
Muchas gracias por compartir estas experiencias.
Saludos y abrazos desde Colombia.
Elvira